Limpieza y desinfección con ozono
La limpieza con agua ozonizada hace innecesario el uso de productos químicos en los procesos de limpieza de mantenimiento, consiguiendo además unos niveles de higienización difícilmente superables. A efectos de higienización el ozono elimina el 99,9% de las bacterias nocivas. Seis segundos de contacto son suficientes para que el ozono consiga los máximos niveles de higienización. Los sistemas de limpieza a base de agua ozonizada permiten ahorrar tiempo, reducir costes y proteger el medio ambiente.
El agua ozononizada se puede utilizar en todo tipo de superficies como cristal, espejos, acero inoxidable, madera, alfombras,
piedras naturales, mármol e incluso en el lavado de cualquier tipo de textiles. Está especialmente indicado en la limpieza de guarderías infantiles, escuelas, hospitales, centros médicos, geriátricos, centros deportivos, gimnasios y otras instituciones donde deban extremar los niveles de higiene, aunque por razones prácticas y de costes está recomendada para la limpieza de cualquier tipo de instalación o superficie.
El agua ozonizada se produce a través de unos generadores de ozono que producen una carga eléctrica y activan el agua del grifo mejorando de forma radical la limpieza y la higienización. Está comprobado que un tercio de los productos de limpieza usados hoy en día tiene ingredientes muy peligrosos. En este sentido la OMS manifiesta que ha llegado el momento de cambiar a métodos completamente libres de químicos para limpiar y cuando estos están basados en el ozono permiten garantizar unos niveles de higiene insuperables.